ND Podcast : Batallas diarias en el Sáhara Occidental – En lugar de paz: La misión de la ONU Minurso vigila la guerra entre el Polisario y el ejército de Marruecos
Desde hace 30 años, la fuerza de mantenimiento de la paz de la ONU, la Minurso, está estacionada en el Sáhara Occidental, en el marco de un plan de paz para lograr una solución para la última colonia de África. Dos tercios del territorio de la costa atlántica noroccidental están ocupados por Marruecos. La parte restante está controlada por el Frente de Liberación del Polisario, que lucha por un Estado independiente para la población saharaui. El referéndum previsto no se ha materializado durante tres décadas, y mientras tanto el alto el fuego negociado en 1991 también es historia. Mientras las armas vuelven a hablar, el Consejo de Seguridad de la ONU tiene que decidir sobre la prórroga del mandato de la Minurso que expira el domingo.
Sobre sus barrigas, un puñado de combatientes del Polisario se arrastra por una colina llena de gravilla. Por debajo de la cresta, los hombres permanecen tumbados, arriesgándose sólo brevemente a levantar la cabeza para echar un vistazo con los prismáticos. Delante de ellos y de las posiciones militares marroquíes que hay detrás, a un kilómetro y medio aproximadamente, hay un enorme muro de arena equipado con instalaciones de radar. Desde la década de 1980, más de 2.700 kilómetros han separado el territorio de 266.000 kilómetros cuadrados y a ellos mismos de su tierra natal, de la que fueron expulsados por Marruecos junto con sus familias en 1975. Detrás de ellos se encuentra la inmensidad de la parte liberada, llanuras desérticas hasta donde alcanza la vista.
Los combatientes pertenecen a una unidad de la 6ª Región Militar del Polisario en la zona de Mahbes, a 100 kilómetros al oeste de la frontera argelina. De repente, el fuego de la artillería y el estruendo de los impactos tras el muro de arena rompen el silencio. Poco después, se produce el contraataque marroquí. Las nubes de humo de las detonaciones se elevan no muy lejos del punto de observación. « Llevamos realizando este tipo de ataques a lo largo del muro todos los días desde que suspendimos el alto el fuego hace casi un año », explica a « nd » Hamma Shaddad, comandante de la unidad. « Los marroquíes devuelven el fuego cuando hay destrucción en sus posiciones. Sabemos exactamente cómo está posicionado el ejército enemigo detrás del muro y qué objetivos estamos atacando. Esta vez el contraataque fue inmediato. Eso quiere decir que alcanzamos los objetivos ».
El canoso Shaddad ya luchó en la primera guerra y fue herido varias veces. « Al final, resultó que este proceso de la ONU no condujo prácticamente a nada. Por eso retomamos las armas con mucho entusiasmo », dice. Su superior, el Comandante en Jefe de la 6ª Región Militar, Bali Hamoudi Nadjem, se sitúa a su lado y es aún más explícito: « Los 29 años de alto el fuego no han servido para nada. Para mí, esto es una mancha oscura en nuestra historia. Nunca deberíamos haber aceptado un plan que básicamente nadie quiere aplicar. Sin esta decisión, habríamos alcanzado nuestro objetivo hace mucho tiempo », afirma con determinación.
El Polisario declaró el fin del alto el fuego el 14 de noviembre del año pasado y poco después declaró todo el Sáhara Occidental como zona de guerra. No hay cifras oficiales de víctimas. Hasta ahora, se habla de unos 25 combatientes del Polisario y civiles saharauis muertos, principalmente debido a los ataques de drones marroquíes.
Sin embargo, para Marruecos esta guerra no tiene lugar oficialmente. Sin embargo, los informes diarios del Ejército de Liberación Saharaui en el frente afirman: « El ejército de ocupación marroquí está sufriendo considerables pérdidas materiales y humanas a lo largo del Muro de la Vergüenza ».
El Reino de Marruecos ha aprovechado los últimos años para crear un hecho consumado en los territorios ocupados. Se han ampliado masivamente las infraestructuras y se han impulsado las actividades económicas, también con la ayuda de empresas extranjeras. Están en juego importantes materias primas como el fosfato y la arena, pero también el pescado. El Polisario acusa a la ONU de hacer la vista gorda ante esto, así como ante las violaciones de los derechos humanos en los territorios ocupados; además, la ONU no quiere ver las maniobras de Marruecos para impedir un referéndum y sólo ha trabajado a medias en la aplicación del plan de paz. Por ello, los dirigentes del Polisario exigen ahora garantías y señales claras del Consejo de Seguridad de la ONU.
El líder del Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Brahim Ghali, renovó la semana pasada ante la prensa internacional su disposición al diálogo. « La guerra y las negociaciones no son mutuamente excluyentes. La guerra nos fue impuesta y es un acto de autodefensa en el camino hacia un Estado soberano », dijo el hombre de 73 años. Él mismo perteneció al primer grupo guerrillero que lanzó el movimiento de liberación en 1973 con ataques contra la entonces potencia colonial España. Sus palabras también iban dirigidas al nuevo enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura. Se supone que debe hacer que las partes en conflicto vuelvan a la mesa. Para el comandante de la región de Mahbes, esto también es probablemente una pérdida de tiempo. Bali Hamoudi Nadjem da esperanzas de algo más.
El líder del Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Brahim Ghali, renovó la semana pasada ante la prensa internacional su disposición al diálogo. « La guerra y las negociaciones no son mutuamente excluyentes. La guerra nos fue impuesta y es un acto de autodefensa en el camino hacia un Estado soberano », dijo el hombre de 73 años. Él mismo perteneció al primer grupo guerrillero que lanzó el movimiento de liberación en 1973 con ataques contra la entonces potencia colonial España. Sus palabras también iban dirigidas al nuevo enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura. Se supone que debe hacer que las partes en conflicto vuelvan a la mesa. Para el comandante de la región de Mahbes, esto también es probablemente una pérdida de tiempo. Bali Hamoudi Nadjem da esperanzas de algo más: « Muchos más jóvenes de los campos de refugiados se presentan en el frente de lo que podemos reclutar por el momento ».
Claudia Altmann
ND Podcast, 29/10/2021
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